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martes, 30 de diciembre de 2014

Pintura japonesa de tinta china: la sumi-e, IV

La pintura japonesa de tinta china: los formatos de la sumi-e, II
La semana pasada hable de los dos formatos más reducidos de la sumi-e japonesa, el de la pintura en rollo, generalmente de tal longitud que impide contemplarla en su totalidad con "una sola mirada", y  el de las obras pensadas para colgar en una pared, casi siempre del tokonoma

Hoy  comentaré otros dos formatos, esta vez de mayor dimensión. En mi opinión, a pesar de que casi todos los emakimono tienen varios metros de longitud, dada su poca altura, no se puede considerar que sean obras de gran formato, pues suelen contemplarse a poca distancia. 

martes, 23 de diciembre de 2014

Pintura japonesa de tinta china: la sumi-e, III

La pintura japonesa de tinta china: los formatos de la sumi-e, I
Después de las explicaciones de la semana pasada sobre la pintura japonesa de tinta china y el zen, hoy comentaré los diferentes tipos de formato sobre los que se ejecutaba. El 2 de mayo de 2013, en uno de mis primeros y más visitados artículos, traté ya ese tema muy genéricamente y dos días más tarde, el 4 de mayo, expliqué algunos aspectos de una famosa pintura en rollo. Pues bien, en esta entrega hablaré de nuevo de los aspectos relacionados con la forma, tamaño y tipo de soporte de la pintura de tinta china.

Aunque la sumi-e japonesa parecía especialmente adecuada para los pequeños formatos debido a su propia naturaleza, los artistas japoneses no se quedaron ahí, sino que también la utilizaron en fusuma (puertas correderas) y en enormes biombos. Pero vayamos por partes y veamos algunos ejemplos en los diferentes soportes.

martes, 16 de diciembre de 2014

Pintura japonesa de tinta china: la sumi-e, II

La pintura sumi-e y el zen
Después de la pequeña introducción sobre la pintura sumi-e japonesa que hice la semana anterior, en este artículo voy a comentar un poco las relaciones entre los monjes de la orden budista zen y la pintura de tinta china japonesa.

El zen
A finales del siglo XIII, la invasión de China por parte de los mongoles forzó la huida a Japón de muchos monjes de aquel país. Como consecuencia, su presencia en los templos nipones contribuyó a la expansión del zen por todo el archipiélago japonés. La práctica de la autodisciplina que esa orden se imponía, su confianza en el esfuerzo y la concentración, así como su rechazo del esotérico panteón de divinidades del budismo ortodoxo contribuyeron a que su mensaje fuera muy bien recibido por una clase militar, dominante durante esos años, acostumbrada al sacrifico y a vivir el momento sin confiar más que en su propia decisión y coraje.

martes, 9 de diciembre de 2014

Pintura japonesa de tinta china: la sumi-e, I

La sumi-e o suiboku-ga, pintura japonesa de tinta china
Hoy inicio una serie de artículos dedicados a la pintura japonesa en tinta china, también conocida con los nombres de sumi-e o suiboku-ga, durante el periodo Muromachi (1333-1573), una época que coincide aproximadamente con el Renacimiento italiano.

Si bien el comienzo de este movimiento europeo suele situarse en los albores del siglo XV, ciertos autores consideran que sus orígenes se remontan aún más atrás, hasta el XIV. En ese caso, la sincronía del periodo Muromachi japonés con el Renacimiento italiano sería aún mayor. Esta comparación tiene sentido por cuanto estamos hablando de unos años de enorme esplendor artístico en ambos países.

martes, 2 de diciembre de 2014

Arquitectura moderna japonesa: Tange Kenzō, XXVI

La arquitectura moderna japonesa: Tange Kenzō, las últimas obras
La semana pasada hablé del nuevo ayuntamiento de Tokio proyectado por Tange Kenzō y hoy voy a concluir esta serie dedicada a la etapa final de su carrera comentando tres de sus últimas obras construidas en Tokio.

La Universidad de las Naciones Unidas, 1992
La sede de la Universidad de la Naciones Unidas en Tokio es un edificio de solo catorce plantas cuyas enormes vigas a 45º muestran una megaestructura apenas disimulada por un revestimiento de granito gris en dos tonos. En la fotografía siguiente se observa que esos elementos singulares solo se manifiestan en las fachadas laterales.