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martes, 12 de enero de 2021

Arquitectura del albergue tradicional japonés, el ryokan, X

En los anteriores artículos vimos algunos de los elementos arquitectónicos que definen un espacio japonés, en nuestro caso el de un ryokan, y hoy entraremos en el mundo del mobiliario, el cual, si bien podría considerarse que no pertenece al entorno estrictamente arquitectónico, desempeña un importante papel en la creación de la atmósfera o ambiente de cualquier interior. 

En ningún otro lugar como en Japón la idea que lleva asociada el término “muebles”, es decir, objeto que se puede mover, es tan adecuado. Se ha comentado muchas veces, y yo también lo he hecho, que las habitaciones japonesas de estilo clásico parecen vacías y que eso es debido a la ausencia de sofás, sillas, mesas, etc., o sea, de muebles. 

El mobiliario
Analicemos un poco las piezas más habituales del mobiliario de un ryokan. En una habitación de estilo clásico casi nunca faltará una mesita baja, en japonés zataku, con unos cojines o zabuton. En muchos casos, estos se incorporan a unos sillines con respaldo y sin patas, llamados zaisu, que se complementan con un apoyabrazos o kyōsoku. Si se trata de un albergue de estricto ambiente tradicional, no tendrá camas ni colchones de tipo occidental, sino que utilizará el denominado futon, que, sin embargo, en algunos establecimientos es de diferente material y mayor grueso que el clásico. 

Suite en el ala nueva del ryokan Hiiragiya, Kioto. Foto: ryokan Hiiragiya, 2017.

En la fotografía anterior vemos casi todos los muebles que puede haber en la habitación de un ryokan: la mesita baja, los cojines, los respaldos y el apoyabrazos, nada más es necesario. Si en el aposento no hay otras salas, al llegar la noche, una persona del establecimiento retirará esos muebles y colocará sobre el tatami el o los futon que hasta ese momento estaban guardados en un armario.

Futon desplegado sobre el tatami en una habitación en el ala nueva del ryokan Hiiragiya, Kioto. 
Foto: ryokan Hiiragiya, 2017.

Respecto a esos respaldos zaisu, de los que ya hablé en otra entrada de este blog, debo decir que hacen un poco más cómoda la postura de quien se sienta en el suelo pues le permiten, aunque sea solo de vez en cuando, apoyar la espalda. En este artículo dedicado al diseño moderno japonés inserté la foto y el comentario siguientes:

Fujimori Kenji (Takeshi): zaisu de madera de zelkova, 1961. 
Medidas: 33x49 cm, respaldo 40 cm. Foto: rakuten.co.jp

"En la fotografía anterior se muestra una de las muchas versiones de un zaisu, un elemento extremadamente sencillo y funcional que, además, es apilable y trasladable de un lugar a otro. Muy a menudo, como se aprecia en esa ilustración, en la zona del asiento se crea un agujero que sirve para fijar un cojín y al mismo tiempo reducir su deslizamiento sobre el tatami. Este tipo de “asiento sin pies” pone en evidencia la importancia que tienen las patas de las sillas en su aspecto final. "

No pocos de los modernos ryokan de cierto nivel ofrecen a sus clientes amplias suites con ambientes diferenciados, uno a modo de salón, pavimentado con tatami con una mesita baja, y otro con entarimado donde se colocan camas de diseño internacional o butacas convencionales. También puede darse la opción de que el dormitorio disponga de dos zonas, una con tatami sobre el que, cada noche, se colocan los futon, y otra con suelo de madera y equipada con mobiliario occidental.

Suite del ryokan Gora Kadan, Hakone, prefectura de Kanagawa. Foto de la web del ryokan.

En la fotografía anterior vemos que en la zona de tatami se sitúan los muebles de estilo japonés, la mesita baja, los cojines con sus respaldos y los apoyabrazos, mientras que en la galería, en este caso con tatami en vez de suelo de madera, se colocan un par de sillones y una mesita de estilo occidental, todos con un sistema de patas adecuado a ese acabado.

En algunos casos esa fusión se lleva más lejos y en la zona con tatami se colocan muebles de estilo internacional. Eso es lo que vemos en la siguiente ilustración de una suite con dos zonas, la de dormitorio y la del salón, ambas con tatami, la primera con los futón ya extendidos en el suelo y la segunda, en primer término, con unas mesas y sillas que más de un lector de mi blog reconocerá.

Habitación del ryokan Nishiyama en Kioto. Foto de la web del ryokan.

En la habitación de la foto anterior se han utilizado muebles de reconocidos diseñadores del siglo XX. En primer término, en el área destinada a salón, vemos dos mesitas con las características patas en abanico de Alvar Aalto (1998-1976) y cuatro las sillas Teiza diseñadas en 1960 por Daisaku Chō (1921-2014), a quien dediqué un artículo de la serie sobre diseño moderno japonés que publiqué en este blog en el que decía: 

"Daisaku creó la silla Teiza, también conocida como silla Sakura, pensando en su uso en el entorno nipón de los años sesenta, cuando todavía en casi todas las viviendas japonesas había habitaciones con tatami. Por ese motivo, la silla es muy baja, solo 28 cm de altura, y se apoya en dos pies de base alargada para repartir el peso y así no dañar el tatami."

Daisaku Chō: silla Teiza, 1960, fabricada para Tendo.
Medidas: 69x55x65 cm de altura del respaldo
y 28 cm del asiento. Foto: 1stdibs. com

Y luego seguía diciendo: "Como vimos en anteriores artículos, la silla baja de Daisaku se sitúa en aquel punto intermedio que mencioné en este artículo sobre la evolución del diseño de las sillas en Japón y que marca el paso del hábito de sentarse en el suelo a hacerlo en un asiento convencional a unos 45 centímetros de altura."

En esa misma foto del ryokan vemos que, al fondo, en la zona destinada a dormitorio ya están colocados los futon y junto a ellos hay una silla, es la silla Spoke de Toyoguchi Kappei (1905-1991). En ese mismo artículo del año 2017 dedicado al diseño japonés decía sobre ella:

"La silla Spoke, su obra [de Toyoguchi] más conocida creada en 1963 para Tendo, tiene unas patas cortas que colocan su asiento muy cerca del suelo, a solo treinta y cuatro centímetros. Su amplio asiento en forma oval se cubre con un mullido cojín pensado para sentarse con las piernas cruzadas al modo japonés, como si se estuviera sobre un tatami. Sin embargo, también es posible hacerlo a la occidental, de tal forma que a un individuo de 1,80 metros de altura sus muslos le queden en posición horizontal." 

Toyoguchi Kappei: silla Spoke para Tendo, 1963. 
Medidas aprox.: 81x68cm, asiento 34 cm, respaldo 83 cm. 
Foto: tendo-mokko.co.jo

Con esto doy por acabado el tema de los muebles en los ryokan de Japón. En la próxima entrega hablaré de las instalaciones.

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