martes, 31 de julio de 2018

El diseño moderno japonés a partir de 1945, XX

La tercera generación de diseñadores japoneses, 2
Hace quince días comenté la obra de Kawakami Motomi y hoy lo haré de otro diseñador japonés de su misma generación, la de los nacidos en los años cuarenta del pasado siglo: Umeda Masanori.

Umeda Masanori (1941-)
Umeda Masanori se licenció en 1962 en la reconocida Escuela de diseño Kuwasawa. De 1967 a 1969 trabajó con Achille Castiglione (1918-2002), y en 1970 Ettore Sottsass (1917-2007) le invitó a trabajar para la Olivetti, empresa con la que colaboró hasta 1979, cuando fundó su propio estudio de diseño. En los años ochenta formó parte del grupo Memphis que ya he comentado en un artículo anterior.

Umeda Masanori. 
Foto: memphisgroup.weebly.com

El espíritu juguetón y desenfadado de Memphis, con su rechazo del diseño “serio” alemán y los postulados de la Bauhaus, se muestra de manera clara en la producción de Umeda quien, en 1981, creó un sofá con forma de ring de boxeo que, según él, debía usarse como hacen los japoneses cuando se sientan sobre los tatami.

Umeda Masanori: ring de boxeo Tawaraya, 1981. Suelo de tatami. 
Medidas: 280x280x120 cm de alto. Foto: memphis-milano.com

Según Umeda, con su diseño se planteaban dos situaciones completamente diferentes: una la que se produce en un ring como lugar occidental donde impera lo dinámico y otra la que se genera en el espacio oriental, donde sentarse en el suelo supone estatismo y tranquilidad. 

Umeda Masanori: ring de boxeo Tawaraya, 1981. 
Suelo de tatami. Medidas: 280x280x120 cm de alto. 
Foto: memphis-milano.com

En la siguiente foto vemos a los fundadores de Memphis sentados en el sofá de Umeda. El japonés deseaba que su “ring” fuera el campo de tranquilas batallas verbales, algo que parece posible por la franca sonrisa que exhiben todos ellos.

Umeda Masanori: ring de boxeo Tawaraya, 1981. Suelo de tatami. 
Medidas: 280x280x120 cm de alto. Foto: memphis-milano.com

La estantería-robot Ginza es una divertida parodia de los personajes de los manga japoneses de los años ochenta como Mazinger-Z. Su altura es semejante a la de una persona, su corazón son los cajones, y sus brazos, los estantes. Uno de sus pies se adelanta como dispuesto a andar.

Umeda Masanori: librería Ginza, 1982.
 Medidas: 150x42x175 cm de alto. Madera con laminado plástico. 
Foto: memphis-milano.com

La silla Getsuen se inspira en la campanilla japonesa y como su hermana menor la butaca Rose que muestro luego, es un prodigio de calidad y perfección de acabado, como todos los productos Memphis.

Umeda Masanori: sillón Gestuen, 1990.
Estructura metálica y acabado de terciopelo sobre poliuretano.
Medidas aprox.: 97x90x 87 cm de alto. Foto: 1stdibs.com

El saber hacer de la industria del mueble italiana en los años ochenta asombraba a todo el mundo. Sus productos no eran únicamente piezas para sorprender y dar el toque de color al lugar elegido. Vistos de cerca, cuando se tocan y usan, especialmente en el caso de los sofás y sillones, Memphis alcanzaba las más altas cotas de perfección manufacturera, con unos materiales, técnica y acabados de altísima calidad.

Umeda Masanori: sillón Gestuen, 1990. 
Estructura metálica y acabado de terciopelo
sobre poliuretano. 
Medidas aprox.: 97x90x 87 cm de alto. 
Foto: 1stdibs.com

La silla Rose, diseñada por Umeda en 1990, tiene una estructura de aluminio con partes de madera y varias capas de un mullido tapizado de terciopelo para, además de por su forma, evocar los pétalos de rosa también con su textura.

Umeda Masanori: silla Rose, 1991.
Poliuretano, madera y pies de aluminio fundido, tapicería de terciopelo.
Medidas aprox.: 86x79 cm, asiento 46 cm, respaldo 77 cm. Foto: 1stdibs.com

Con esto finalizo este corto artículo. Dentro de quince día hablaré de otro diseñador japonés, Toshiyuki Kita.