Arte moderno japonés:
Gutai, VIII
Hace quince días hablé de los trabajos que Murakami y Shimamoto ejecutaron en
la “Segunda exposición de arte Gutai”,
y hoy lo haré de los que Shiraga y Tanaka presentaron en esa misma muestra.
“Segunda exposición de arte Gutai”, 1956, segunda parte
Con este artículo concluiré mis comentarios sobre la “Segunda
exposición de arte Gutai” con dos acciones-obras que, como las que expliqué en
la anterior entrega, también forman parte del mejor patrimonio de Gutai. Me
refiero a las aportaciones de Shiraga Kazuo y Tanaka Atsuko.
Shiraga Kazuo: Pintando con los pies
En anteriores exposiciones de Gutai, Shiraga siempre
demostró una especial “visceralidad” en sus acciones. Primero fueron sus
hachazos contra troncos de madera, luego su lucha contra el barro y finalmente el cuadro que ejecutó con los pies para el reportaje de la revista Life.
En esta ocasión, Shiraga da un paso más en su “técnica” de
uso de los pies para aplicar el óleo en sus telas. En primer lugar, coloca en
el suelo una hoja de papel de unos nueve por tres metros. Una vez se ha
quitado los calcetines y remangado los pantalones, empieza a verter aquí y allá una espesa pintura. Cada vez que echa un color diferente, lo extiende con los pies creando trazos de enorme anchura y densa
textura. Poco a poco, a medida que la superficie blanca se va cubriendo con los pigmentos,
aumenta el frenesí de Shiraga hasta el punto de revolcarse sobre la grasienta superficie.
El cuadro que Shiraga había pintado con los pies, colgándose de una cuerda, para la revista Life, se convierte en esta “Segunda exposición de arte Gutai” en una lucha contra los pigmentos semejante a aquella que realizó revolcándose en arcilla en el Ohara kaikan de Tokio, en octubre de 1955.
Un par de párrafos más adelante, inserto un clip de YouTube en el que se ve a
Shiraga creando un par de obras al aire libre. Previamente, extiende en el suelo los lienzos sobre los que trabajará con dos "técnicas" diferentes. Mientras, su mujer, Shiraga Fujiko (1928-2015), prepara pinturas de diferentes colores.
En primer lugar, desgarra unos paraguas japoneses para utilizarlos como gigantescos pinceles con los que extender los pigmentos sobre el soporte. A continuación, emplea un ábaco (instrumento oriental que se usa para efectuar operaciones matemáticas) para frotar y mezclar aún más los colores.
Para el segundo lienzo, se cuelga de una cuerda que le permitirá desplazarse por encima del soporte de una forma a la vez libre y aleatoria. Suspendido de esa manera, utilizará solo los pies para ejecutar unos enormes trazos con la densa pintura. En el vídeo se indica que la grabación es de 1964. Dura menos de cuatro minutos.
En primer lugar, desgarra unos paraguas japoneses para utilizarlos como gigantescos pinceles con los que extender los pigmentos sobre el soporte. A continuación, emplea un ábaco (instrumento oriental que se usa para efectuar operaciones matemáticas) para frotar y mezclar aún más los colores.
Para el segundo lienzo, se cuelga de una cuerda que le permitirá desplazarse por encima del soporte de una forma a la vez libre y aleatoria. Suspendido de esa manera, utilizará solo los pies para ejecutar unos enormes trazos con la densa pintura. En el vídeo se indica que la grabación es de 1964. Dura menos de cuatro minutos.
Tanaka Atsuko: Vestido eléctrico
En anteriores artículos, vimos que Tanaka había comenzado a trabajar con tejidos en las
primeras muestras de Gutai, y que en la segunda exposición al aire libre de Ashiya ya presentó unas enormes telas con aspecto de maniquí en
las que había incorporado unas luces. Después de varios meses de pruebas, logra poner a
punto un artilugio que le permite presentar la que seguramente sea su obra más
radical.
En este caso, el tejido cede el paso a unas bombillas de diferentes formas y colores que cubren totalmente el cuerpo de la propia Tanaka. La artista aparece ataviada con un pesado conjunto de luces multicolores y cables colocados sobre una prenda negra. Las lámparas se encienden y apagan de manera aleatoria mediante unos interruptores que ella misma acciona mientras se va moviendo lentamente. La foto siguiente muestra una reconstrucción moderna de esa obra.
A continuación, adjunto un video
de YouTube grabado en agosto del año 2007 en la Documenta de Kassel, donde se
expuso una recreación del vestido eléctrico de Tanaka. Dura solo dieciséis
segundos.
Creo que con esto ya queda bastante claro lo que fue esa
“Segunda exposición de arte Gutai” celebrada en Tokio. A partir de ese momento,
la actividad del grupo comenzará a ser conocida internacionalmente. Eso lo veremos
en el siguiente artículo.